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martes, enero 12, 2010

NUESTROS MÚSICOS EN EL MUNDO - DIEGO ALONSO GARCÍA (CELLO) NOS CUENTA SU EXPERIENCIA CON LA JONDE Y EL SISTEMA DE ORQUESTAS JUVENILES DE VENEZUELA


Dos de los músicos que han pasado por nuestra Orquesta JJMM-ULE (Diego Alonso García, violoncello y Javier Fierro Astiárraga, contrabajo) tuvieron la oportunidad el pasado mes de noviembre´09 de participar en el II Festival Encuentro de Artes España-Venezuela, como componentes de la Joven Orquesta Nacional de España (JONDE).

Pedimos a Diego Alonso García que nos hablara sobre su experiencia. Podéis leer su respuesta haciendo clic en su foto
NOCHEVIEJA 09/10 EN VALDEVIMBRE

El vídeo que encabeza esta noticia es el primer movimiento de la Seranata para cuerdas de Tchaikovsky, interpretada por una orquesta de cuerda formada por la Orquesta Teresa Carreño (Venezuela) y la JONDE, dirigidos por el Maestro Ulyses Ascanio.
El resto de movimientos los puedes ver en los siguientes enlaces:

3 comentarios:

juanluisgx dijo...

Como miembro titular de la Joven Orquesta Nacional de España (JONDE) durante 5 años (2004-2008), he tenido la oportunidad de vivir experiencias musical y personalmente muy gratificantes para mi formación musical.

Todos conocemos hoy en día o hemos oído hablar de la Orquesta Sinfónica Juvenil Venezolana Simón Bolivar y de su director artístico, Gustavo Dudamel, que forman a su vez parte de un proyecto ilusionante que comenzó allá por 1975, encabezado por el Maestro José Antonio Abreu y un grupo de muchachos, cuando éste creo la primera orquesta Sinfónica Juvenil Nacional de Venezuela. El proyecto, llamado más adelante Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela surgió de la base de considerar la música como un todo y no hacer separaciones entre los distintos tipos de músicas, tanto de concierto como de floklore, una manera de educar donde la música llega a convertirse en pilar fundamental de la preparación integral de las personas. El objetivo no se refiere sólo al plano artístico sino que se inserta directamente en una política de prevención, capacitación, autoestima y cultivo de los valores éticos y estéticos vinculados a la vida musical y de ahí su inmensa utilidad en lo relativo a la formación de la personalidad y desarrollo de la mente y del trabajo intelectual.

Según datos del Sistema, en 2008 el movimiento alcanzó un número de 291.258 niños y jóvenes, que integraron 145 Orquestas Juveniles, 156 Orquestas Infantiles, 19 Orquestas Profesionales, 644 Agrupaciones Corales, 1.355 Agrupaciones Corales afiliadas y 20 Talleres de Luthería, distribuidos por todo el territorio nacional y ofreció empleo a quince mil profesores de música. En un futuro se quiere amplar a 1 millón de niños y Jóvenes.

“Ser músico hoy en día, en las poblaciones más alejadas de nuestro territorio, significa un orgullo y una forma de vida digna en la sociedad venezolana. Y si alguien siguiera dudando de las virtudes de este gran Sistema de Orquestas, nada más tendría que pensar en las drogas y en la delincuencia para comprobar cómo a través de la actividad musical miles de jóvenes y niños venezolanos se han alejado de la tentación de estos flagelos que hoy avanzan sin piedad” afirma orgulloso el maestro Abreu.

Del seno del sistema, han surgido músicos profesionales como Gustavo Dudamel, ahora director titular en Los Angeles Philharmonic, y habiendo dirigido ya, a sus 28 años, a todas las grandes orquestas mundiales, como Berliner Philharmoniker, Wiener Philharmoniker, Royal Concertgebouw Orchestra, New York Philharmonic, entre muchas otras, y al joven Edicson Ruiz, contrabajista que hizo historia al ingresar con tan solo 17 años en la Berliner Philharmoniker.

juanluisgx dijo...

En Marzo de 2008, se pone en marcha el I Festival de Artes entre Venezuela y España en Caracas, en el que participa la Joven Orquesta Nacional de España junto al Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela en la parte musical, puesto que el Festival también pretende abarcar el resto de artes con sendos intercambios de artistas Venezolanos y Españoles, con un éxito rotundo.

En Noviembre de 2009, se lleva a cabo la segunda edición del Festival, para el cual tengo la oportunidad de ser seleccionado, como parte de la expedición de 30 jóvenes músicos miembros y antiguos miembros de la JONDE. La experiencia me ilusionaba, pero quizás no sabía realmente lo que me iba a encontrar. Durante 16 días íbamos a desarrollar una serie de actividades musicales junto a miembros de dos orquestas del Sistema, la Orquesta Sinfónica de la Juventud Venezolana Simón Bolivar y la Sinfónica Juvenil Teresa Carreño, y alguna visita a los Núcleos del Sistema, dónde se desarrollan las primeras etapas de la educación musical del Sistema. Una vez allí, nuestra percepción de lo que está llevando a cabo el Sistema, nos dejó a todos impresionados, independientemente de la realidad social de Venezuela con todos sus problemas sociales, musicalmente se les puede considerar como el Primer Mundo a nivel musical y como futuro de la música y un ejemplo a seguir por todos los países. Nos recibieron con las manos abiertas dispuestos a mostrarnos todo lo que tienen y a compartir maravillosas experiencias, transformadas en conciertos y en amistades personales. Todos los conciertos fueron una experiencia única y la convivencia del día a día fueron impactantes. Todos conocemos las maravillas de la Orquesta Sinfónica de la Juventud Venezolana Simón Bolivar y a ninguno nos decepcionó, pero quizás lo que más nos sorprendió fue la Sinfónica Juvenil Teresa Carreño, quizás no tan mediática, pero que está llamada a ser otro referente dentro del Sistema de Orquestas.

Jóvenes de 16 a 22 años con unas cualidades musicales increíbles, con unas ganas de trabajo asombrosas y una capacidad de sacrificio tremendas, ya que muchos están separados de sus familias al tener que residir en Caracas, para ensayar 4 horas todas las tardes de Lunes a Sábado e incluso a veces los Domingos, además de completar sus estudios musicales con los profesores del sistema. Compartimos atriles con ellos, aumentando así la complicidad y la relación personal, comidas, cenas, por supuesto fiestas también, todo para trabajar juntos en la preparación del que puedo decir sin duda, el mejor concierto y la mejor experiencia conjunta en mi vida musical hasta el momento, y que sin duda recordaré toda mi vida. La Serenata de cuerdas de Tchaikovsky que ensayamos durante una semana e interpretamos en concierto, es sin duda la mejor manera de mostrar todas las ganas e ímpetu que se pusieron conjuntamente para brindar una interpretación única, que ninguno de nosotros olvidará.

juanluisgx dijo...

Qué decir de la visita al Núcleo que hicimos, en uno de los barrios mas pobres de la ciudad, dónde pudimos comprobar como niños y niñas de 4 a 12 años comparten las tardes aprendiendo a tocar juntos en orquestas, coros y diversas agrupaciones musicales sin importar si tu compañero de atril es el hijo de la criada de tus padres y aprendiendo a convivir desde la infancia. Nos brindaron 3 pequeñas muestras en forma de concierto, y así disfrutamos de un coro de niños cantando canciones populares, o de una orquesta de cuerda de niños de 4 a 7 años, en la que varios de ellos acababan de empezar ese mismo día, o de una orquesta con niños que llevaban aproximadamente tocando desde hacía un año, los cuales nos interpretaron el primer tiempo de la primera Sinfonía de Beethoven, algún extracto de L'Arlessiene de Bizet o de Verdi. También tuvimos tiempo para charlar con algunos de estos niños y para que el encargado del Núcleo nos explicara cómo ellos tienen las puertas abiertas a toda la comunidad, y todos los días llegan niños a apuntarse o cómo tienen que lidiar con casos de violencia en casa de los niños, o de cómo enseñar a niños con diferentes deficiencias a hacer música y hacerles partícipes de ella.

En fin, una experiencia inolvidable que a todos nos marcó profundamente en la que a diferencia de Europa y otras partes del mundo, toda la sociedad venezolana está orgullosa (todos los conciertos se llenan de público tanto como para escuchar a los niños y a los jóvenes) y de la que todo el mundo reconoce la buena labor que está llevando a cabo, puesto que son innumerables los premios internacionales que está recibiendo el maestro Abreu en representación del Sistema, así como todos los músicos internacionales que visitan el país y se marchan maravillados con lo que musical y socialmente se está desarrollando en Venezuela.